domingo, 28 de noviembre de 2010
LA CORONA DE ADVIENTO
La palabra ADVIENTO es de origen latín y quiere decir VENIDA. Es el tiempo en que los cristianos nos preparamos para la venida de Jesucristo. El tiempo de adviento abarca cuatro semanas antes de Navidad.
Una costumbre significativa y de gran ayuda para vivir este tiempo es La corona o guirnalda de Adviento, es el primer anuncio de Navidad.
Origen:
La corona de adviento encuentra sus raíces en las costumbres pre-cristianas de los germanos (Alemania). Durante el frío y la oscuridad de diciembre, colectaban coronas de ramas verdes y encendían fuegos como señal de esperanza en la venida de la primavera. Pero la corona de adviento no representa una concesión al paganismo sino, al contrario, es un ejemplo de la cristianización de la cultura. Lo viejo ahora toma un nuevo y pleno contenido en Cristo. El vino para hacer todas las cosas nuevas.
Nueva realidad:
Los cristianos supieron apreciar la enseñanza de Jesús: Juan 8,12: «Yo soy la luz del mundo; el que me siga no caminará en la oscuridad, sino que tendrá la luz de la vida.». La luz que prendemos en la oscuridad del invierno nos recuerda a Cristo que vence la oscuridad. Nosotros, unidos a Jesús, también somos luz: Mateo 5,14 «Vosotros sois la luz del mundo. No puede ocultarse una ciudad situada en la cima de un monte."
En el siglo XVI católicos y protestantes alemanes utilizaban este símbolo para celebrar el adviento: Aquellas costumbres primitivas contenían una semilla de verdad que ahora podía expresar la verdad suprema: Jesús es la luz que ha venido, que está con nosotros y que vendrá con gloria. Las velas anticipan la venida de la luz en la Navidad: Jesucristo.
La corona de adviento se hace con follaje verde sobre el que se insertan cuatro velas. Tres velas son violeta, una es rosa. El primer domingo de adviento encendemos la primera vela y cada domingo de adviento encendemos una vela mas hasta llegar a la Navidad. La vela rosa corresponde al tercer domingo y representa el gozo. Mientras se encienden las velas se hace una oración, utilizando algún pasaje de la Biblia y se entonan cantos. Esto lo hacemos en las misas de adviento y también es recomendable hacerlo en casa, por ejemplo antes o después de la cena. Si no hay velas de esos colores aun se puede hacer la corona ya que lo mas importante es el significado: la luz que aumenta con la proximidad del nacimiento de Jesús quien es la Luz del Mundo. La corona se puede llevar a la iglesia para ser bendecida por el sacerdote.
La corona de adviento encierra varios simbolismos:
La forma circular: El círculo no tiene principio ni fin. Es señal del amor de Dios que es eterno, sin principio y sin fin, y también de nuestro amor a Dios y al prójimo que nunca debe de terminar.
Las ramas verdes: Verde es el color de esperanza y vida. Dios quiere que esperemos su gracia, el perdón de los pecados y la gloria eterna al final de nuestras vidas. El anhelo más importante en nuestras vidas debe ser llegar a una unión más estrecha con Dios, nuestro Padre.
Las cuatro velas: Nos hacen pensar en la obscuridad provocada por el pecado que ciega al hombre y lo aleja de Dios. Después de la primera caída del hombre, Dios fue dando poco a poco una esperanza de salvación que iluminó todo el universo como las velas la corona. Así como las tinieblas se disipan con cada vela que encendemos, los siglos se fueron iluminando con la cada vez más cercana llegada de Cristo a nuestro mundo. Son cuatro velas las que se ponen en la corona y se prenden de una en una, durante los cuatro domingos de adviento al hacer la oración en familia.
Las manzanas rojas que adornan la corona: Representan los frutos del jardín del Edén con Adán y Eva que trajeron el pecado al mundo pero recibieron también la promesa del Salvador Universal.
El listón rojo: Representa nuestro amor a Dios y el amor de Dios que nos envuelve.
ADVIENTO, PREPARACIÓN PARA LA NAVIDAD
Significado del Adviento
La palabra latina "adventus" significa “venida”. En el lenguaje cristiano se refiere a la venida de Jesucristo. La liturgia de la Iglesia da el nombre de Adviento a las cuatro semanas que preceden a la Navidad, como una oportunidad para prepararnos en la esperanza y en el arrepentimiento para la llegada del Señor.
El color litúrgico de este tiempo es el morado que significa penitencia.
El tiempo de Adviento es un período privilegiado para los cristianos ya que nos invita a recordar el pasado, nos impulsa a vivir el presente y a preparar el futuro.
Esta es su triple finalidad:
- Recordar el pasado: Celebrar y contemplar el nacimiento de Jesús en Belén. El Señor ya vino y nació en Belén. Esta fue su venida en la carne, lleno de humildad y pobreza. Vino como uno de nosotros, hombre entre los hombres. Esta fue su primera venida.
- Vivir el presente: Se trata de vivir en el presente de nuestra vida diaria la "presencia de Jesucristo" en nosotros y, por nosotros, en el mundo. Vivir siempre vigilantes, caminando por los caminos del Señor, en la justicia y en el amor.
- Preparar el futuro: Se trata de prepararnos para la Parusía o segunda venida de Jesucristo en la "majestad de su gloria". Entonces vendrá como Señor y como Juez de todas las naciones, y premiará con el Cielo a los que han creido en Él; vivido como hijos fieles del Padre y hermanos buenos de los demás. Esperamos su venida gloriosa que nos traerá la salvación y la vida eterna sin sufrimientos.
En el Evangelio, varias veces nos habla Jesucristo de la Parusía y nos dice que nadie sabe el día ni la hora en la que sucederá. Por esta razón, la Iglesia nos invita en el Adviento a prepararnos para este momento a través de la revisión y la proyección:
Revisión: Aprovechando este tiempo para pensar en qué tan buenos hemos sido hasta ahora y lo que vamos a hacer para ser mejores que antes. Es importante saber hacer un alto en la vida para reflexionar acerca de nuestra vida espiritual y nuestra relación con Dios y con el prójimo. Todos los días podemos y debemos ser mejores.
martes, 23 de noviembre de 2010
1º Domingo de Adviento
Descubrir que hoy Jesús tiene algo muy importante que decirnos por lo cual debemos tener los ojos...y... el corazón abiertos para poder escucharlo.
• 1- Saludo:
SALUDAR A LOS Niños E INICIAR CON LA SIGUIENTE ORACIÓN:
"Querido Jesús: Tú nos has enseñado que el Padre Dios nos ama y por eso quiere lo mejor para nosotros, sus hijos y hermanos tuyos. Te pedimos: nos des la capacidad de entender el mensaje que hoy nos vas a comunicar para que también, nosotros lo comuniquemos a otros. Amén."
• 2- Actividad
Juego de "Los objetos incompletos":
• 3. VAMOS A ESCUCHAR A JESÚS SEGÚN NOS RELATA EL EVANGELISTA SAN MATEO EN EL CAPITULO 24,37-44.
¨ Mientras se oye la lectura, contemplamos el dibujo.
"Cuando venga el hijo del hombre sucederá lo mismo que en los tiempos de Noé. En los días que precedieron al diluvio, la gente comía bebía y se casaba, hasta el día en que entró Noé al arca; y no se dieron cuenta hasta que vino el diluvio y los arrastró a todos. Pues así será también la venida del Hijo del hombre. Entonces, de dos que haya en el campo, uno será tomado y otro dejado. De dos que estén moliendo juntos, uno desaparecerá y otra quedará. Así que velen, porque ustedes no saben qué día llegará su señor. Tenga presente que si el amo de la casa supiera a qué hora de la noche iba a venir el ladrón, estaría en vela y no dejarían que le asaltaran su casa. Lo mismo ustedes, estén preparados, porque a la hora que menos piensen, vendrá el hijo del hombre."
- Entre todos reconstruiremos el pasaje leído, con ayuda del cartel o dibujo.
- Preguntar a los niños qué saben ellos sobre "El Diluvio" ( el catequista anticipadamente habrá leído Génesis, capítulos: 6,7 y 8)
- Comentar y, tratar de responder entre todos
- ¿Por qué nos dice Jesús que debemos estar preparados? ¿Para qué?.
• 4- Explicación del catequista:
Adviento significa "estar preparados". Puede ser que suceda, que mucha gente, muchos niños estén como esos "objetos incompletos", pero como ustedes lo hicieron, se puede arreglar y ser útiles.
La palabra de Dios nos habla de la segunda venida de Jesús, al fin del mundo. La primera venida fue en su nacimiento, en Belén. Por eso nos dice que estemos preparados, que estemos listos y no "incompletos", estar preparados es dar ayuda a los demás, ser buenos y caritativos, solidarios, respetuosos, estudiosos... que compartamos lo que tenemos y pongamos toda la confianza en él, nuestro mejor amigo.
• 5. VAMOS A APRENDER UN CANTO DE "ADVIENTO".
Ven, ven Señor, no tardes; Ven, ven, que te esperamos; ven, ven Señor no tardes, Ven pronto, Señor.
1. El mundo muere de frío, el alma perdió el calor, Los hombres no son hermanos, el mundo no tiene amor.
2. Envuelto en sombría noche, el mundo, sin paz, no ve; buscando va una esperanza; buscando Señor tu fe.
3. Al mundo le falta vida, al mundo le falta luz; al mundo le falta el cielo, al mundo le faltas tú.
• 6. CELEBRACION
Se puede adornar una mesa con una luz y pino. A cada uno de los niños se le dice que escriba en su cuaderno una petición que empiece: Ven Jesús, (por que mucha gente en el mundo no te conoce) .... por ejemplo.
- Elaboradas la peticiones, todos colocados en círculo las van leyendo en alta voz.
-Se entona el canto: "Ven, ven, Señor, no tardes".
-Se reza el Ave María.
• 7- Compromiso:
- Colocar en la habitación un letrero grande con esta expresión: VEN, JESÚS
-TODAS LAS NOCHES, ANTES DE DORMIR, REZARé POR TODOS LOS NIñOS QUE NO CONOCEN A JESÚS Y, POR LO TANTO, NO LO ESPERAN.